Que el sacramento de la confesión esta en crisis no es un secreto, razón por la que el Vaticano, siempre atento a los cambios, ha reaccionado presto con una lista de novedosos pecados para estos tiempos que corren. Muy pronto la experimentación y manipulación genética, el consumo de drogas, el enriquecimiento exagerado o la contaminación entre otros, formarán parte de "nuevas formas de pecado social". Esto no lo digo yo, lo ha dicho el obispo Gianfranco Girotti (de los Girotti de toda la vida) responsable del Tribunal de la Penitenciaría Apostólica. Yo que soy pecador vocacional (de toda la vida, como Girotti, pero amateur), ya he reservado on line mi cita confesional para evitar las colas ante la previsible demanda, porque con estas nuevas maldades seguro que no se salva ni dios.
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3 comentarios:
yo voto por retroactivo, lo mejor es que reconocen que ha dejado de confesarse un 60 % de los fieles, ya solo nos queda convencer al otro 40% que eso del sentimiento de culpa es una chufla.
linóleo
Pues a la iglesia no le vendría mal un poco se sentimiento de chufla.
Para creer en Dios se necesita fe, y para creer a la iglesia además de fe, mucho sentido del humor.
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